Jacques Briochin: Crème de cirage incolore (Betún en crema incoloro para zapatos)

7.95 €

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Nada como pisar fuerte todos los días que con un calzado cómodo y reluciente. Para ello, tienes que cuidar de tus zapatos con productos enriquecidos con ceras naturales, libres de siliconas que puedan estropear su material. La Crème de cirage incolore de Jacques Briochin cumple con esos requisitos y más.

Este betún para zapatos en crema incoloro está enriquecido con cera de abejas y cera de carnauba que penetran profundamente y nutren tus pieles lisas, reavivando el color y aportando brillo. Gracias a su formulación sin siliconas, no obstruye los poros de la piel y la deja respirar. ¡Ahora sí estarás listo para caminar!

Esta es una foto de Jacques Briochin.

Aplica la crema con movimientos circulares con un paño o un cepillo. 

Deja secar y luego pulir con una media de nailon o un paño. 

Para un cuidado completo, puedes usar la leche limpiadora para cuero de Briochin.

Mantener fuera de alcance de los niños.

50ml.

Cera de abejas, cera de carnauba y nafta hidrotratada de bajo punto de ebullición.

Reaviva la brillantez natural de tus calzados deslucidos con esta crema de textura ligera que nutre y protege las cualidades propias de la piel en una sola aplicación. Además su tono incoloro la hace perfecta para aplicar en calzado de cualquier color.

Corría el año 1919 por la Bretaña francesa cuando Renald Raoul, un comerciante de ceras, estrenaba título de padre y creaba la marca Le Briochin. Su hijo, Jacques Briochin, fue llamado así como los habitantes de Saint-Brieuc en Cotes d'Armor, donde viven y fabrican los productos.

En su taller, Renald Raoul creaba detergentes y productos de limpieza para profesionales: pintores, mecánicos, artesanos, etc. Algún tiempo después, el boca a boca les ayudó y sus productos superaron la frontera Bretona, reconocidos como los productos más efectivos.

Comenzando los años 90 y en respuesta a las peticiones de los clientes particulares, ampliaron su rango al público general. Fue entonces cuando el negocio Le Briochin pasó a llamarse Jacques Briochin. Los empresarios visionarios tuvieron entonces una idea: ¿qué pasaría si Jacques Briochin acompañara a los hombres y mujeres en sus hogares? Para ello, había que estar presente en hipermercados y supermercados. ¡Y lo hicieron!

Gracias a la lealtad de los consumidores, la familia se expandió. Ahora se compone de más de una veintena de productos que respetan y mantienen impecables todas las superficies y habitaciones de nuestras casas. Desde su comienzo ofrecen productos de alta calidad que demuestran su savoire-faire y su gran tradición en el negocio familiar, en el que ya llevan varios siglos de la historia francesa.